6.6.11

Perfil: la cambiante trayectoria política de Ollanta Humala ..de la BBC

Ollanta Humala
Cambio es una palabra por la que Ollanta Humala debe, por estos momentos, sentir aprecio. Después de todo, si este exmilitar se convirtió en el nuevo presidente de Perú, fue gracias a su disposición para cambiar.


Podría haber seguido los pasos de su padre, Isaac, fundador del movimiento etnocacerista, que aboga por la supremacía de la "raza cobriza" y de la identidad incaica por sobre el hombre blanco.

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Pero el oriundo de Lima prefirió optar por una visión menos radical: simplemente el nacionalismo que al día de hoy lo acompaña.

Segundo de siete hermanos, Ollanta -nombre que en quechua significa "el guerrero que todo lo ve"- sintió predilección por la carrera militar.

A principios de la década de los noventa, en su calidad de capitán del ejército, debió combatir a la guerrilla de Sendero Luminoso.

Por su actuación en aquella época enfrentó una investigación judicial, luego archivada, por supuestas violaciones a los derechos humanos.

En el capítulo más controversial de su vida, acompañó a su hermano Antauro en el levantamiento que junto a algunas decenas de soldados lideraron en el año 2000 contra el régimen de Albero Fujimori.

Consideraban que Fujimori, al frente de un gobierno acosado por los escándalos, estaba "usurpando el poder" y que se encontraba "ilegítimamente" al frente del país.

Su acción le valió la destitución del ejército. Tiempo después recibió una amnistía del Congreso.

Adiós a las armas
Fue momento de dejar las armas y empezar a pensar en las urnas, por lo que siguió una maestría en Ciencia Política en la Universidad Católica

Y cuando cinco años después su hermano Antauro se alzó de nuevo, esta vez contra el gobierno de Alejandro Toledo –motivo por el cual permanece preso–, Humala, quien tuvo una reacción ambigua al hecho, ya no lo siguió.

"Perú ha cambiado, y entonces los políticos también debemos cambiar"

Ollanta Humala
Estaba en Corea del Sur en calidad de agregado militar de la embajada peruana. En esa función también pasó por Francia, donde aprovechó para estudiar Derecho Internacional en La Sorbona.

Volvió al país y en 2005 creó, junto a su esposa Nadine Heredia, el Partido Nacionalista Peruano.

Al año siguiente quedó al borde de la Presidencia. Se impuso en primera vuelta pero no pudo en el balotaje con Alan García.

En aquella elección su radicalismo, sus ataques al mercado, su vinculación con el presidente venezolano Hugo Chávez y el hecho de ser visto como el candidato "antisistema" –un calificativo del cual todavía no se termina de deshacer– le valieron la derrota.

Moderado
Para este año sabía que si quería ganar, tenía que cambiar hasta estéticamente: dejó la camisa roja por la celeste.


Tras su derrota electoral en 2006, Humala dejó atrás la camisa roja.
También suavizó el discurso, un movimiento que acentuó tras ganar en primera vuelta con el 31,7% de los votos.

Juró sobre la Biblia defender la democracia y respetar la Constitución. Y prometió una y otra vez que no buscará la reelección.

Necesitó dar señales para calmar a los mercados y mostrar su cara más amable.

En su programa de gobierno inicial criticaba el modelo neoliberal "excluyente" y hablaba de una nueva Constitución. Tiempo después en su "Hoja de Ruta" mencionaba mantener la apertura económica y resguardar la estabilidad macroeconómica.

Los asesores que contrató del Partido de los Trabajadores de Brasil hicieron su trabajo, el de que Humala se corriera al centro y se convirtiera en una oferta electoral más apetecible.

"Perú ha cambiado, y entonces los políticos también debemos cambiar", le dijo al diario The New York Times el mes pasado.

Pero para sus críticos sigue siendo una incógnita. Y dudan sobre qué va a hacer en el gobierno.

Si en la campaña le pidió a los peruanos que no le tengan miedo al cambio, ahora deberá despejar la desconfianza que inspira en parte del electorado.

A los 48 años alcanza la Presidencia, lo acompaña su esposa –partícipe en el proceso de suavizarle la imagen–, tres hijos y medio país que lo votó en la segunda vuelta.

Sus seguidores y el resto de los peruanos observarán, expectantes, cada uno de sus pasos.

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"Muchas gracias queridos hermanos". El virtual presidente de Perú se dirigió a las miles de personas que desde hace más de seis horas lo esperaban en la Plaza 2 de Mayo de Lima, emblemática para la izquierda peruana, para celebrar su virtual triunfo electoral.


"Esta noche renuevo mi compromiso con el pueblo peruano de crecimiento económico con inclusión social", prometió. "Vamos a continuar lo bueno, corregir lo malo y a hacer que el crecimiento sean políticas reales que resuelvan el problema pensionario, de salud, educación, de infraestructura y de seguridad".

El último sondeo de la Oficina Nacional de Procesos Electorales, al 87,8% de las actas escrutadas, amplía las apretadas distancias entre Keiko y Fujimori en algo más de un punto haciendo la victoria del nacionalista prácticamente un hecho. Obtuvo el 51,2% de los votos y Keiko el 48,7%.

Humala tardó en pronunciarse públicamente sobre los resultados de estas reñidas elecciones y no fue hasta las 11.30 de la noche cuando decidió ir al encuentro de sus votantes, que lo esperaban pacientemente en la Plaza 2 de mayo. Su mensaje duró sólo media hora y fue positivo y moderado, consciente de la necesidad de calmar los ánimos de la mitad del país que no votó por él y también de los mercados.

"Sabemos que gobernar no es tema de una persona, vamos a convocar a los mejores cuadros para poder hacer un gobierno de concertación y de ancha base en el que todos nos sintamos representados", prometió en la noche del domingo Humala ante miles de personas.

"¡Sí se pudo!", le coreaban los asistentes en su primer mitin como presidente. Humala estuvo acompañado en el escenario por su mujer, Nadine Heredia, y toda su bancada al Congreso, además de al menos un centenar de periodistas y medios de comunicación nacional e internacional.

"No tengo ningún compromiso con ningún grupo económico", continuó. "Mi único compromiso es con pueblo peruano, son mis jefes y a ustedes tengo que rendir cuentas", prosiguió.

Durante el mitin, hizo un recuento de los programas sociales que tiene previsto hacer durante su gobierno, que son también sus principales propuestas electorales. Entre ellos Pensión 65, para otorgar una pensión solidaria a los adultos mayores y Cuna Más, una especie de guarderías para niños que trabajan. También el aumento del salario mínimo y caminar hacia el Aseguramiento Universal en Salud.

Keiko agradece a sus votantes
Tras conocer los primeros sondeos y conteos rápidos, Keiko Fujimori compareció ante la prensa en el emblemático Hotel Bolívar del centro de Lima. Agradeció los votos de casi la mitad del país pero no se pronunció sobre las cifras de los primeros conteos. "Una vez conocidos los resultados oficiales me pronunciaré como debe ser", dijo a los medios después de expresar su "satisfacción" porque el margen de distancia entre ella y su rival se había reducido en el conteo rápido.

Ningún integrante de Fuerza 2011, el partido fujimorista, aceptó dar declaraciones a la prensa sobre los resultados y permanecieron en ese hermetismo hasta el fin de la jornada.

Festejos en las calles
Miles de personas celebraron anticipadamente el triunfo de Humala desde el cierre de los centros de votación en las Plazas de Armas de las principales ciudades del país. Al grito de "¡Ollanta corazón!" esperaron durante horas los resultados del escrutinio oficial, que se retrasó hasta las 22.00 de la noche.

La alegría y la esperanza de las calles contrastó este domingo con los mensajes de desconfianza vertidos por economistas, analistas, y políticos de la derecha democrática en los canales de televisión nacional.

El Gobierno se sumó al mensaje pesimista. El Ministro de Economía, Ismael Benavides, aseguró tras conocer el flash electoral sobre el triunfo de Humala que existe un plan de contingencia en el caso de que los mercados caigan como reacción a su triunfo.

Quien sí se pronunció fue Félix Jiménez, autor del plan de gobierno de Gana Perú. Dio un mensaje de tranquilidad al país y pidió al Banco Central de Reserva "frenar ataques especulativos" para no afectar a la economía.

Para apaciguar los ánimos del casi 50% que no votó por Humala, aseguró que mantendrán la economía de mercado, el crecimiento económico y trabajarán para la inclusión social.

A los mensajes tranquilizadores se unió Daniel Abugattas, vocero del partido de Humala, Gana Perú. Abugattas prometió que uno de los anuncios que hará Humala será decir quién será su Primer Ministro y su Ministro de Economía. "Es una práctica común y el país lo exige, la economía lo exige, los mercados nacionales lo exigen y Gana Perú responderá a la altura de las circunstancias".

Ollanta Humala se presentó a las elecciones con su "Gran Transformación" bajo el brazo, un plan de gobierno de casi 200 páginas en las que defendía una nueva Constitución que deje atrás la del 93, promulgada por Fujimori padre tras el autogolpe, y una "economía nacional de mercado" que potencie las PYMES y la producción nacional. También la renegociación de los tratados de libre comercio, impuestos a las sobre ganancias mineras, una reforma tributaria e importantes programas sociales para reducir la desigualdad.

Después de la segunda vuelta, en la que obtuvo el 31% de los votos, recibió el apoyo de Mario Vargas Llosa y los técnicos del partido de Alejandro Toledo. Comenzó entonces el trabajo de convencer a las clases medias de la moderación de su discurso. Para ello, elaboró una nueva hoja de ruta económica, en la que renunció a una Asamblea Constituyente y se comprometió a mantener el crecimiento. Una semana más tarde, con Biblia en mano, juró ante Mario Vargas Llosa y decenas de intelectuales que respetaría la democracia, la libertad de expresión y la Constitución.

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