En el curso de esta semana se produciría una reunión del Comité Nacional de Salarios, encuentro en el que se aprobaría posiblemente un reajuste salarial a los trabajadores del sector privado, según supo El Nuevo Diario por medio de una fuente confiable. El viernes pasado, al celebrarse el Día Internacional del Trabajo, obreros de diferentes puntos del país celebraron la ocasión para demandar del sector patronal un aumento justo en los salarios de los trabajadores, significando que si eso no se ejecuta lo más pronto posible se verían en la necesidad de convocar a un paro laboral a nivel nacional.
El sector laboral tiene más de un año exigiendo a los patronos un aumento salarial de un 40% para los trabajadores que ganan hasta los 30 mil pesos mensuales y de un 25% para aquellos que perciben más de 30 mil pesos mensuales.
El vicepresidente del Consejo Nacional de la Unidad Sindical (CNUS), Rafael-Pepe-Abreu, quien funge como vocero de los trabajadores en las negociaciones con los empresarios ha reiterado en varias ocasiones que la canasta familiar de una familia compuesta por 5 personas se ha situado por encima de los 23 mil pesos mensuales, mientras hay familias que no reciben ni un 20% de esta cantidad durante un mes.
Trascendió que los patronos solamente estarían dispuestos a que se reajusten los salarios mínimos, mientras que los dirigentes laborales exigen que un reajuste salarial se haga en la misma proporción en beneficio de toda la clase trabajadora.
La reunión del Comité Nacional de Salarios, de acuerdo a la misma fuente se realizaría el jueves 7 en horas de tarde y la misma serían convocados los representantes de ambos sectores en esa instancia.
Los trabajadores para lograr su objetivo han venido realizando marchas, caminatas, vigilias, manifestaciones, así como visitas a las entidades importantes del país, como son el Congreso, el Palacio Nacional y a la sede principal del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), a fin de presionar para lograr la aprobación de un reajuste salarial significativo a favor de la clase trabajadora.
De su lado, los dirigentes patronales se han opuesto a un reajuste salarial argumentando que los costos operacionales de sus empresas se han incrementado en los últimos tiempos, situación que hace imposible reajustar los salarios de sus trabajadores.
Asimismo, entienden, que si acceden a las demandas del sector laboral se verían en la obligación de despedir a miles de sus asalariados, lo que incrementaría la tasa de desempleo, destacando que lo que debe hacerse ahora es una alianza estratégica entre patronos y trabajadores con el objetivo de que no se pierdan los empleos existentes en esta etapa en que en la mayor parte del mundo se han perdido millones de empleos como consecuencia de la crisis económica que sacude a todo el globo terráqueo.
Por otra parte, del lado oficial, el secretario de Estado de Trabajo, Max Puig, en varias ocasiones ha venido realizando encuentros con los representantes de ambos sectores a fin de que se llegue a un acuerdo razonable que beneficie a la clase trabajadora, mientras que el vicepresidente de la República, doctor Rafael Alburquerque, ha externado declaraciones en procura de que se llegue a un acuerdo razonable entre trabajadores y patronos en torno a un reajuste salarial.
El sector laboral tiene más de un año exigiendo a los patronos un aumento salarial de un 40% para los trabajadores que ganan hasta los 30 mil pesos mensuales y de un 25% para aquellos que perciben más de 30 mil pesos mensuales.
El vicepresidente del Consejo Nacional de la Unidad Sindical (CNUS), Rafael-Pepe-Abreu, quien funge como vocero de los trabajadores en las negociaciones con los empresarios ha reiterado en varias ocasiones que la canasta familiar de una familia compuesta por 5 personas se ha situado por encima de los 23 mil pesos mensuales, mientras hay familias que no reciben ni un 20% de esta cantidad durante un mes.
Trascendió que los patronos solamente estarían dispuestos a que se reajusten los salarios mínimos, mientras que los dirigentes laborales exigen que un reajuste salarial se haga en la misma proporción en beneficio de toda la clase trabajadora.
La reunión del Comité Nacional de Salarios, de acuerdo a la misma fuente se realizaría el jueves 7 en horas de tarde y la misma serían convocados los representantes de ambos sectores en esa instancia.
Los trabajadores para lograr su objetivo han venido realizando marchas, caminatas, vigilias, manifestaciones, así como visitas a las entidades importantes del país, como son el Congreso, el Palacio Nacional y a la sede principal del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), a fin de presionar para lograr la aprobación de un reajuste salarial significativo a favor de la clase trabajadora.
De su lado, los dirigentes patronales se han opuesto a un reajuste salarial argumentando que los costos operacionales de sus empresas se han incrementado en los últimos tiempos, situación que hace imposible reajustar los salarios de sus trabajadores.
Asimismo, entienden, que si acceden a las demandas del sector laboral se verían en la obligación de despedir a miles de sus asalariados, lo que incrementaría la tasa de desempleo, destacando que lo que debe hacerse ahora es una alianza estratégica entre patronos y trabajadores con el objetivo de que no se pierdan los empleos existentes en esta etapa en que en la mayor parte del mundo se han perdido millones de empleos como consecuencia de la crisis económica que sacude a todo el globo terráqueo.
Por otra parte, del lado oficial, el secretario de Estado de Trabajo, Max Puig, en varias ocasiones ha venido realizando encuentros con los representantes de ambos sectores a fin de que se llegue a un acuerdo razonable que beneficie a la clase trabajadora, mientras que el vicepresidente de la República, doctor Rafael Alburquerque, ha externado declaraciones en procura de que se llegue a un acuerdo razonable entre trabajadores y patronos en torno a un reajuste salarial.
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