A propuesta del gobernante, la comisión la coordinará el abogado Mariano Germán y estará integrado por César Pina Toribio, ministro de la Presidencia, así como los juristas Flavio Darío Espinal, Eduardo Jorge Prats, Olivo Rodríguez Huertas y Víctor Joaquín Castellanos.
El gobernante encomendó a esa comisión la elaboración de una fórmula “que nos permita resolver este problema técnico que tenemos por delante”. La propuesta debe estar lista a más tardar el 17 de febrero que concluirá la legislatura extraordinaria en el Congreso.
La sugerencia se hizo en la parte final del foro “Hacia un Tribunal Constitucional: prerrogativas y competencias”, que se efectuó ayer en el segundo nivel de la Fundación Global Democracia y Desarrollo (Funglode), convocado por el presidente Fernández a propósito del debate que ha generado en distintos sectores de la sociedad la aprobación de la ley que regirá el nuevo órgano.
En el acto de anoche reveló que convocó al encuentro ante la sugerencia que hizo en ese sentido el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez.
Fernández dijo que con la creación del Tribunal Constitucional no se busca crear un órgano de “suprapoderes” que todos los demás estamentos del Estado estén sujetos a su voluntad y que para lograr una ley que se ajuste a la realidad y posibilidades de la República Dominicana se requiere de flexibilidad y lucidez.
“Nosotros la vemos como algo relevante y positivo para la democracia en la República Dominicana. Fue una discusión civilizada, de altura, profesional, académica que sirve como una especie de pedagogía política democrática para el pueblo dominicano”, observó el gobernante.
De su lado, el rector de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), Agripino Núñez Collado, calificó el foro como una consulta intelectual que engrandece la democracia de la República Dominicana. A la convocatoria no asistieron, como ya se había previsto, los representantes del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) ni el presidente de la Suprema Corte de Justicia, Jorge Subero Isa.
Estuvieron Agripino Núñez Collado, que fungió como moderador del debate; el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez; la primera dama, Margarita Cedeño de Fernández; el vicepresidente, Rafael Alburquerque; el presidente del Senado, Reinaldo Pared Pérez; de la Cámara de Diputados, Abel Martínez; el ministro de la Presidencia, César Pina Toribio; el vicepresidente Ejecutivo de la Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus), Servio Tulio Castaños Guzmán; Marco Herrera, director ejecutivo de Funglode, entre otros.
Los debates iniciaron con una exposición de casi 40 minutos que hizo Milton Ray Guevara sobre la evolución y desarrollo del concepto del derecho Constitucional y el Tribunal Constitucional.
Juristas reiteran su posición
Los debates por la aprobación de la ley orgánica del Tribunal Constitucional se han generado por la modificación que hizo el Senado al proyecto del Ejecutivo y según lo aprobado el nuevo organismo no podrá revisar las Sentencias de la Suprema.
De los participantes que hicieron uso de la palabra, solo Alburquerque, Pared Pérez y Pina Toribio reiteraron su posición de que en la ley orgánica que regirá el Tribunal Constitucional, se mantenga con las modificaciones que hizo el Senado, que establece que el Tribunal Constitucional no puede revisar las sentencias que emita la Suprema Corte de Justicia y que hayan adquirido la categoría de la cosa irrevocablemente juzgada.
Los juristas Germán Mejía, Marino Vinicio Castillo, Jorge Prats, entre otros, reiteraron su posición de que el Tribunal Constitucional revise las sentencias de la Suprema Corte de Justicia, pero observaron que es la ley que regirá su funcionamiento la que debe establecer cuándo y cómo debe hacerse esa revisión. Igualmente, advirtieron que la reglamentación sobre el funcionamiento del nuevo órgano no debe dejarse a que sean los jueces del tribunal los que las establezcan sino que debe hacerlo la legislación.
En tanto, los juristas, Julio César Castaños Guzmán y Olivo Rodríguez, entre otros, observaron que 13 jueces para integrar el Tribunal Constitucional es una exageración.
En tanto, Pina Toribio y Pared Pérez, aclararon que la Constitución no prohíbe que los jueces que integren el Tribunal Constitucional tengan 75 años o más porque lo que establece la Carta Magna en esa materia es una edad mínima de 35 años. La ley del tribunal tiene que estar aprobada para el próximo 26.
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