Pou Castro había sido trasladado al ese centro de salud desde la cárcel de Najayo donde cumplía su condena.
El ex militar había sido recluido en el hospital central de las Fuerzas Armadas en otras ocasiones aquejado de problemas cardíacos.
La Corte de Apelación de San Pedro de Macorís lo había sentenciado a 20 años de prisión por la muerte del comunicador, y tras apelar, la Suprema Corte de Justicia (SCJ) le aumentó de 20 a 30 años la condena al acoger como bueno y válido un recurso de casación interpuesto por la familia de Orlando.
El alto tribunal judicial adoptó la decisión, tras considerar que la participación de Pou Castro en la muerte del comunicador social, más que de complicidad, fue de “co-autoría”.
Pou Castro, cuando intervino en el hecho de sangre ostentaba el rango de capitán del Ejército Nacional.
Fue enviado al tribunal como cómplice del asesinato, debido a que no disparó su arma de reglamento para matar al periodista, pero era el conductor del vehículo que el 17 de marzo del 1975 lo persiguió desde la avenida San Martín cuando salió de la redacción del periódico El Nacional, manejando su vehículo rumbo a la UASD y al llegar a la José Contreras fue atacado a tiros.
Por la muerte de Martínez Howley fueron inculpados además, Cabrera Durán, De la Rosa Beras, Isidoro Martínez González y Eulogio Cordero Germán, cuya instrucción estuvo a cargo del Juzgado de Instrucción de la Cuarta Circunscripción del Distrito Nacional, que dictó la providencia calificativa el cuatro de abril del año 1997.
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