11.12.11

Noriega llega a Panamá para cumplir sus condenas


Noriega
El ex general panameño Manuel Antonio Noriega, juzgado en Francia tras cumplir una pena por narcotráfico y lavado de dinero en EEUU, fue el hombre fuerte de Panamá, el poder detrás de los gobiernos de turno, desde 1981 hasta la invasión estadounidense de diciembre de 1989.


Nacido en la ciudad de Panamá en el seno de una familia humilde el 11 de febrero de 1935, según su registro en el Seguro Social -otras fuentes señalan 1934 ó 1938-, Noriega asistió a una escuela pública y obtuvo una beca para estudiar milicias en el famoso centro del Chorrillo.
A su regreso, en 1962, se alistó como teniente en la Guardia Nacional, donde empezó una carrera meteórica ayudado por su astucia y oportunismo. Se especializó en guerra psicológica, contrainsurgencia y lucha contra el narcotráfico.
En 1968 apoyó el golpe militar que llevó al poder al general Omar Torrijos y dos años después, en 1970, fue nombrado jefe del servicio de inteligencia: el temido G-2, en agradecimiento a su colaboración para sofocar una conspiración.
Tras la muerte de Torrijos en un accidente de avión en 1981, Noriega se disputó el poder con el general Rubén Darío Paredes, entonces jefe de la Guardia Nacional, quien, creyendo tener el suficiente apoyo, pidió la baja del Ejército para presentarse como candidato a la Presidencia. El 12 de agosto de ese mismo año, Noriega fue nombrado jefe de la Guardia Nacional en sustitución de Paredes.
Noriega, cuando fue capturado por el Ejército de EEUU tras la invasión de Panamá en diciembre de 1989. | AFPNoriega, cuando fue capturado por el Ejército de EEUU tras la invasión de Panamá en diciembre de 1989. | AFP

Apoyo de EEUU

Pese a las acusaciones de tener vínculos con el narcotráfico y el contrabando de armas, Noriega contó en todo momento con el apoyo de Estados Unidos. En 1984 arrestó al teniente coronel Julián Melo, uno de sus más estrechos colaboradores, como responsable de una red de narcotráfico.
En 1985, el oficialista Nicolás Ardito Barletta, que ganó las elecciones de 1984 gracias a un fraude, fue obligado a dimitir por Noriega, tras abrir una comisión para investigar el asesinato del opositor Hugo Spadafora, del que era acusado el propio Noriega. Su sustituto fue el hasta entonces vicepresidente Eric Arturo Delvalle, que correría la misma suerte en 1988, cuando ordenó el paso a retiro de Noriega y su destitución. Él movía los hilos país. Nada ni nadie se resistía a sus planes.
"El que se va es él", fue la respuesta de los militares cuando Del Valle anunció la destitución de Noriega, tras casi un año de crisis política protagonizada por la Cruzada Civilista para acabar con la dictadura militar.
El detonante de esa crisis fue el coronel Díaz Herrera, que en mayo de 1987, despechado por su pase a retiro, acusó a Noriega de narcotráfico, del asesinato de Spadafora, de complicidad en la muerte de Omar Torrijos y del fraude electoral de 1984.

Condenas y encarcelamientos

Estas denuncias llevaron a Estados Unidos a cambiar su opinión sobre quien hasta entonces era su hombre en Panamá. Le dio la espalda y, a petición de la justicia, terminó por reclamarle para juzgarle por narcotráfico.
Mientras, en Panamá, las elecciones de 1989, ganadas por Guillermo Endara, fueron anuladas en medio de disturbios y se nombró presidente a Francisco Rodríguez, lo que supuso la continuidad de un régimen tutelado por los militares.
El 20 de diciembre de 1989, cinco días después de que asumiera el puesto de jefe del Gobierno, las tropas estadounidenses invadieron el país para "restablecer la democracia" y capturar a Noriega, algo que lograron el 3 de enero de 1990. Noriega se entregó tras haber permanecido unos días refugiado en la Nunciatura.
Casi dos años después, en septiembre de 1991 comenzó el juicio en su contra y, el 9 de abril de 1992, fue condenado a 40 años de cárcel por ocho delitos de narcotráfico y blanqueo de dinero.
La extradición del ex militar panameño a Francia se ha producido dos años después de que la justicia estadounidense diera por cumplida su pena y pese a que Noriega afronta varias condenas en Panamá por la muerte y desaparición de opositores entre 1968 y 1989.

PANAMA.- El exgeneral Manuel Antonio Noriega regresó hoy a Panamá, más de 20 años después de su captura por el Ejército de Estados Unidos durante la invasión militar de 1989, para hacer frente a condenas que suman más de 60 años de cárcel.


Noriega llegó extraditado desde Francia, con una escala en Madrid, en un vuelo de Iberia que aterrizó en el aeropuerto de Tocumen, unos 27 kilómetros al este de la capital, hacia las 18.07 hora local (23.07 GMT), para ser inmediatamente llevado a la cárcel.

No hay comentarios:

Publicar un comentario