Es el incremento de enfrentamientos entre estudiantes dentro y fuera de los planteles lo que ha motivado a la Dirección General de Seguridad Escolar a organizar operativos repentinos y constantes, con el fin de desarmar a los alumnos que poseen objetos punzo-cortantes y hacerlos entender que a las escuelas no pueden llevar armas.
Los operativos se realizan en coordinación con la Fiscalía de Niños, Niñas y Adolescentes, directores de escuelas y las asociaciones de padres y de alumnos.
El coronel Francisco Rhommel López, director de Seguridad Escolar, atribuye el incremento de la delincuencia en las escuelas a la falta de “educación familiar” y a la “conducta deliberada que adquieren algunos niños en el hogar”. Las pesquisas en las escuelas, que no tienen fecha ni horas conocidas, se realizan luego de una labor de inteligencia de los policías escolares y los directores de centros educativos, al notar anomalías en los salones de clases.
Según López, en los últimos dos años se han ejecutado 61 operativos en las escuelas que registran más violencia a nivel nacional, siendo el mayor, el ejecutado en esta semana en el liceo Francisco Bautista, de Bonao, en el cual se recolectaron cuchillos, puñales y un arma de las denominadas “chilena” dentro de un inodoro.
Cuando a un estudiante se le incauta un objeto cortante, la seguridad escolar le da seguimiento a través de su departamento de orientación y psicología, donde es atendido por un personal capacitado en temas de prevención de drogas y le dan atención a jóvenes en conflictos, respeto a las leyes y reconocimiento a los símbolos patrios.
Además, los jóvenes en conflicto son integrados a programas especiales del Ministerio de Educación, donde también se integra a los padres.
Con respecto a los centros educativos privados, López dijo que la Policía Escolar no se involucra, debido a que sus atribuciones se limitan a las escuelas del sector público. Por eso no entró en detalles sobre el joven de 17 años al que le ocuparon un arma en un colegio privado en San Cristóbal.
Reclutarán a escolares
La Dirección General de Seguridad Escolar tiene asiento en el Distrito Nacional, con presencia en las provincias Santo Domingo, Santiago, Barahona, La Vega, San Cristóbal, Duarte, La Romana, San Pedro, Hato Mayor, Azua, Peravia, San Juan, Espaillat y Monseñor Nouel. Está dotada de 1,025 miembros, que no son suficientes para establecer un ambiente de tranquilidad en los recintos educativos, por lo cual en un futuro se dedicará a aceptar a estudiantes que deseen hacer su labor dentro de la institución. Como entidad organizada, dependiente de la Policía Nacional, tiene por objetivo ejecutar políticas pro-activas en materia de seguridad en los centros educativos y dependencias del Ministerio de Educación.
En sus inicios, solo se dedicaba a regular el tránsito vehicular en las escuelas públicas y colegios privados del país, pero a raíz del auge de la delincuencia juvenil, desde el 2003 se dedica a velar por el orden y tranquilidad dentro de los centros educativos.
Las denuncias sobre acciones de violencia entre estudiantes son constantes, aunque muchas no trascienden a los medios de comunicación. Hace dos meses se reportó el caso de una joven estudiante que asesinó a un compañero en la parte frontal del liceo Fray Cipriano de Utrera (Escuela Panamá) en la avenida Venezuela del Ensanche Ozama. Aunque el hecho ocurrió fuera del recinto escolar, la joven, alumna del liceo, esperó que su compañero saliera y le propinó varias puñaladas.
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